Equipo de Política La noche del 12 de marzo de 1990, Patricio Aylwin encabezó un histórico y masivo acto en el Estadio Nacional, en el que realizó su primera intervención, tras asumir como Presidente de la República. Pasadas las 18 horas de ayer, en el Museo Histórico Nacional, y después de presentar a los 22 ministros que lo acompañarán a partir del 11 de marzo próximo, Sebastián Piñera "hizo suya" -dijo él- una frase del discurso del ex Mandatario DC.
"Lo que Chile nos pide es conservar lo bueno, corregir lo malo y mejorar lo regular. Este es el único método para avanzar en el noble y justo afán de acercar la realidad al ideal", citó Piñera, quien reforzó así el concepto de que está liderando una nueva "transición".
"No estamos partiendo de cero, hay mucho camino avanzado y siempre lo hemos reconocido, pero también quiero que quede claro que aún es muy largo y arduo el camino que tenemos que recorrer", agregó. Y agradeció a los cuatro ex presidentes de la Concertación, diciendo que no dudaría en consultarlos.
El mensaje de Piñera -quien recalcó el carácter histórico del lugar, que fue la primera sede de gobierno tras la independencia- se vio reforzado con la inclusión en el gabinete del DC Jaime Ravinet, ex secretario de Estado durante la administración de Ricardo Lagos.
Todo, en el contexto de un equipo ministerial de 22 miembros en el que sólo 9 de ellos son militantes -cuatro UDI, cuatro RN y un DC-, mientras que gran parte de sus integrantes posee un marcado perfil técnico, académico o proveniente del sector privado, y en cuya designación hubo poca participación de los partidos.
A las 18 horas, Piñera fue recibido en la puerta del museo por su jefe de protocolo, Alfonso Silva, mientras adentro lo esperaban dirigentes de la Coalición por el Cambio, colaboradores y familiares de los nuevos secretarios de Estado.
Una ausencia notoria fue la de algunos de los principales senadores de la Alianza, como Andrés Allamand, Pablo Longueira, Andrés Chadwick, Evelyn Matthei y Jovino Novoa. El último de ellos había viajado a China como presidente del Senado. El resto, pese a las respectivas invitaciones, estaba de vacaciones en distintos lugares de Chile.
Durante su intervención, Piñera destacó el perfil de sus ministros, diciendo que poseen "auténtica capacidad y formación académica y profesional, con gran vocación de servicio público y un profundo amor por Chile". Y ante un Rodrigo Hinzpeter que lo escuchaba emocionado, el futuro Mandatario pidió a los funcionarios públicos "que nos ayuden y se sumen a este proyecto".
En esa línea, el Presidente electo no mencionó expresamente el fichaje de Ravinet, aunque sí recordó su "promesa" de concretar un gobierno de "unidad nacional".
Al ser presentados, cada uno de los ministros recibió de manos de Piñera una carpeta, un pendrive -que Piñera les colgó al cuello como una medalla- y un gran organigrama con el detalle del aparato estatal.
El contenido de esos documentos será debatido a partir de las 9 horas de hoy, cuando Piñera encabece su primer consejo de gabinete en la sede de su ex comando de campaña, en Apoquindo. Ahí, los secretarios de estado conocerán y opinarán sobre las listas manejadas por el Presidente electo para nombrar a los distintos subsecretarios, cuyos nombres serán informados la próxima semana.
El marcado perfil técnico e independiente del equipo presentado ayer por Piñera se alejó del criterio planteado la semana pasada por los presidentes de la UDI y RN, quienes habían pedido "equilibrio entre lo técnico y lo político". Ahora los partidos esperan quedar "mejor representados" en las subsecretarías.
Con todo, los abultados currículos académicos de los nuevos secretarios de Estado fueron un aspecto mencionado durante la presentación de cada uno de ellos, y el propio Piñera señaló en su discurso que fueron escogidos "en base sólo a sus méritos personales".
Y bromeó parafraseando a su ex contendor Marco Enríquez-Ominami, diciendo que en el equipo había "jóvenes y no tan jóvenes". El promedio de edad de los ministros es de 49 años.
En ese contexto, el Presidente electo pidió a sus colaboradores "que se graben con fuerza y sangre: esta tarea no será fácil".
Y reforzó uno de los criterios principales que orientará su labor desde el Ejecutivo: el rol principal del Estado será ayudar a las personas, pero lo fundamental será el "esfuerzo personal". Este, agregó, "debe ser apoyado y complementado, pero nunca ahogando ni debilitando la iniciativa y capacidad de emprendimiento".
Así, el Presidente electo rechazó algunas críticas que han surgido desde la Concertación, en el sentido de que con su llegada a la primera magistratura se debilitará el Estado. "No sólo no vamos a debilitarlo, sino que lo vamos a fortalecer, porque en muchas áreas hace falta más y mejor Estado. Y en esas áreas su rol no sólo es esencial, sino insustituible", concluyó.
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